Haz la reserva de 30 € para disponer de un gran precio estas Pascuas

Lanzamos una gran oferta para estas pascuas en Kalahari. Si te interesa debes hacer la reserva ya. (Esta oferta especial es solo hasta el 5 febrero) es nuestro particular black freeday

Del 28 al 31 de marzo  PASCUAS

4 noches de alojamiento en tipis y 4 actividades a elegir

Rafting

River SUP

Kayak

Supervivencia útil

Canoa

Pista de obstáculos

PRECIO POR PERSONA 160 €

Reserva de 30€ el resto se paga la semana anterior

Precio especial para grupo mínimo de 4 personas

Consúltanos cualquier variación o implementación que desees consúltanos

UNA OFERTA DE LOCURA.

Ven a pasar el día a kalahari  te proponemos  muchas cosas o vente unos días con nosotros aquí tienes los packs:

PACK COMPLETO PASCUAS

DIAS   7, 8, 9 y 10 de abril

4 ACTIVIDADES A ELEGIR (las actividades son de larga duración, mínimo medio día) incluye una noche de barbacoa + 3 noches de alojamiento + 1 de regalo

RAFTING

RIVER SUP

KAYAK abierto

KAYAK cerrado

CANOA doble

SUPERVIVENCIA  UTIL

MULTIAVENTURA   (escalada, trelkking y pista de obstáculos)

DESCENSO DE BARRACO   (suplemento 5 € tasas)

Precio por persona …………………….240 € por persona

PRECIO EXPECIAL GRUPOS PACK COMPLETO

Grupo de 4 personas ……………………..198 € por persona

Grupo de 6 personas…………………….. 185 € por persona

Grupo de 8 personas……………………..  175 € por persona

PACK DE 2 DIAS UNA NOCHE

2 ACTIVIDADES A ELEGIR + 1 NOCHE + BARBACOA   Precio   120€ por persona

NOTA

Los alojamientos son en nuestros tipis indios donde dispondrás de cómodos colchones. Necesario traer ropa de cama o saco de dormir.

Las barbacoas se necesita un mínimo de 10 personas, sí son menos se facilitara la carne las verduras, la leña y las parrillas para que cada uno se la haga en nuestras instalaciones.

Las actividades a elegir se necesitan un mínimo de 5 personas para realizarla. Lo normal es que las actividades más clásicas no hay problema para llegar al mínimo.

La actividad de descenso de barranco lleva un suplemento de 5 € para los permisos de entrada

Los precios de las actividades incluyen material necesario para su realización, guías profesionales, seguros de R.C. y accidentes e impuestos.

No incluye transporte a las actividades, ni calzado para las actividades, hay que traer zapatillas deportivas o escarpines. No chanclas.

 

Últimamente me dedico a escribir con mayor o menor acierto. Noto que con el tiempo me vuelvo más analítico con las cosas que plasmo sobre el papel. Eso me ha ayudado a identificar ciertos comportamientos que abundan en nuestro ser y que se repiten constantemente. Uno de ellos es la tendencia humana a generalizar las cosas, casi sin darnos cuenta acabamos aseverando tajantemente y polarizando nuestras opiniones. O eres del sur o eres del norte, o eres de los buenos o eres de los malos, los españoles somos así y los franceses son asá. Estas declaraciones nos llevan a errar constantemente. En el título de este artículo mismo lo podemos ver. NUESTRO MAYOR ERROR, cuando debería decir: uno de nuestros mayores errores, por eso debemos ser lo más cautos posibles a la hora de escribir o de trasmitir, porque sin percatarnos estamos definiendo nuestras posturas y por ende, enalteciendo nuestro ideario. Al parecer es un problema del subconsciente, porque si somos conscientes sabemos que no todos los rusos son malos o que los ucranianos no son todos buenos. (Por poner un ejemplo de actualidad) Hay rusos que odian a Putin tanto o más que los ucranianos, pero en demasiadas ocasiones escuchamos que Rusia esta asesinando civiles. No es Rusia, es el ejército ruso dirigidos por un psicópata y su equipo. Al igual que uno no tiene la razón absoluta, otros no se encuentran totalmente equivocados, siempre hay un tanto por cien de acierto y un tanto por cien de error. Habría que ver cuál es ese tanto por cien de una cosa u otra. Pero al ser humano le es más sencillo generalizar y decir: – Este es un idiota absoluto y este otro un ejemplo a seguir. Otro ejemplo seria catalogar a las personas como inteligentes o necias, cuando está demostrado que hay muchas clases de inteligencia y el que es listo para una cosa puede ser un zopenco para otra, y volvemos a esas generalizaciones que tanto nos gustan, a pesar de que sepamos que no estamos hablando con propiedad ni coherencia. Afinemos nuestra puntería con las palabras, os lo dice el peor francotirador del mundo.

Antonio Robledo ZAPA

Es indudable que el cuerpo humano en ocasiones actúa al margen de nuestro cerebro. Este se encuentra dotado de intervenciones propias en su capacidad de adaptación al medio. Al sumergirnos en el agua durante un tiempo determinado, notamos como la piel de los dedos de nuestras manos sufren unas ligeras ondulaciones como arrugas, perdiendo la tersura que les caracteriza en un medio seco. Este fenómeno se presenta sin conciencia alguna. Estudiosos de la materia aseguran que las yemas de los dedos de manos y pies se vuelven rugosas para generar cierta adherencia en zonas húmedas y resbaladizas. Esta condición nos genera canales de desagüe como el dibujo de los neumáticos a la hora de expulsar el agua y conseguir un mejor agarre en zonas donde podemos resbalar. Como veis el cuerpo es sabio y nos proporciona elementos que probablemente venga de reflejos primitivos en la supervivencia de la especie. A partir de estar 5 minutos sumergidos en el agua aparece esta pequeña metamorfosis en el extremo de nuestras extremidades, (valga la redundancia) también se cree que aparece antes en aguas dulces que en agua salada. Como veis nunca se acaba de aprender y toda información es útil a la hora de bajar ríos y trabajar en el agua, como hacemos en kalahari. Por eso en los barrancos  gatos con guantes, resbalón seguro. Jejejeje. Nos vemos pronto.

Habían cometido la mayor estupidez que hasta la fecha de hoy había visto en un río.

Corría el mes de Noviembre y nos aproximábamos al frio, debido también a  la pandemia que sufríamos, (año 2020) no pudimos facturar un solo euro en ese mes. Cuando de repente sonó el teléfono.

– Hola queríamos contratar una actividad de river SUP para 7 personas para mañana.

–Mañana va a hacer mucho frío dan 5 grados y 35 km. Hora de viento. La sensación térmica. Me interrumpió.

– No importa estamos acostumbrados, pero queríamos alquilar las tablas sin contratar un guía.

– Mira nosotros… volvió a interrumpirme-  ya conocemos la actividad bajamos unas cuantas  veces  y  tenemos experiencia, somos amigos de “fulanito”.

-“fulanito” es un amigo mio muy curtido en aventuras de todo tipo.

– Somos barranquistas, escaladores y surferos.

La verdad es que con ese panorama, no me apetecía, para nada, bajar el río, el tramo elegido por ellos es bastante fácil y es el más concurrido del Cabriel. Aunque no me gusta alquilar el material, dude un poco, pero al final accedí. “maldito parné”

Al día siguiente llegaron a la base de kalahari y les pinté el día un poco mal. Les dije: sí querían  bajar otro día que hiciera bueno, pero no, estaban decididos. – Sois conscientes que si os saltáis el desembarque corréis peligro de muerte por hipotermia. Si, si,  no te preocupes,  lo tenemos controlado. De esa frase tenía que haber sospechado.

Cargamos el material en sus vehículos y les facilité unos chubasqueros cortavientos, que no estaban incluidos.

Puedes indicarnos en el móvil el recorrido, -¡Uy! ¿Pero no habías bajado ya?, -si era un tramo de más arriba. Bueno me tranquilizó pues el tramo de arriba es el tramo fuerte.

-Mirad yo os voy a dar un mapa, donde lo tenéis todo bien explicado. –No, preferimos el GPS.

– Ya, aun así llevároslo. Me mostraron el teléfono donde aparecía el río y les indique el punto de embarque y de desembarque.  – Pero no me fio, llevaros el mapa, os lo regalo.

-Recordad que el día dura poco, a las  5 debéis haber acabado.

No fueron pocas las advertencias que les di, aun así no fueron suficientes

A las 17, 45 recibo una llamada, pensé que venían a devolverme el material.

– Zapa, estamos en un pueblo que se llama Cilanco, ¿puedes venir a por nosotros?

– ¡Cojones! Fue mi primera expresión. -¿Qué hacéis ahí? si estáis  a 30 km. Más abajo de donde deberíais estar.

– No encontramos la salida, habíamos tomado de referencia una roca cuadrada en el desembarque y no la hemos encontrado. Menos mal que hemos visto un señor y le hemos preguntado y nos ha llevado a su casa, donde ha encendido un fuego, estábamos helados.

– No lo entiendo, habéis pasado incluso por una población Villatoya y no os habéis dado cuenta.  Pues buscaros la vida, ya os advertí. Menos mal que habéis encontrado a esa persona sino os metéis en la noche y la siguiente población está a más de 15 km, hubierais muerto de hipotermia seguro.

– ¿Puedes venir a por nosotros? – Que os lleve ese señor a por vuestro coche, yo tengo cosas que hacer. – Es que a este señor le falta una pierna y conduce a duras penas.

– ¡Coño!Bueno iré, pero os voy a cobrar el rescate y además tengo que pasar a otra de región, (Castilla-la mancha) tendré que saltarme el confinamiento perimetral.

– Si lo que haga falta.

No daba crédito, como se podían haber saltado el desembarque con lo que les insistí en ello. Llegué al tiempo y allí estaban todos alrededor de la estufa en traje de neopreno. Calentándose a costa del hombre, al que le faltaba una pierna.

-Pues menos mal que me han visto sino se hubieran metido en un gran lio, se expresaba el hombre, en su humilde casa.  – Ni que lo diga se les ha aparecido un Ángel.- Cojo, matizo él.  Algunas de las chicas estaban indignadas con el chico organizador y voz cantante, ahora era todo reclamaciones y reproches, cuando hacía unas horas presumían de gente curtida y sobrada.

A la vuelta hacia sus coches  les pregunté donde habían dejado el coche. Ellos me decían que había como una nave pintada de blanco. No me sonaba que en el desembarque hubiera nada. No me cuadraba. Al rato de pensar y pensar mientras conducía imaginé lo que había pasado, y así fue.

Los muy…pijos por llamarles de alguna forma, habían cometido la mayor estupidez que hasta la fecha de hoy había visto en un río. Siguiendo el GPS habían ido al desembarque, creyendo que era el lugar donde se embarcaba. Se habían cambiado, puesto los neoprenos y subieron el coche con la ropa seca, dejando el vehículo en el lugar donde se embarca habitualmente, pensando que allí se  acababa el tramo. Se  fijaron en una piedra cuadrada y volvieron al principio, que en realidad era el final. Habían conseguido hacer el transbordo al revés, con razón no encontraban la piedra cuadrada pues esta se encontraba aguas arriba donde jamás llegarían nunca. Estas son las cosas que pasan por no escuchar y fiarse más en la pantalla de un móvil que en las cosas que le dicen a uno. En un móvil no ves la dirección de las aguas del río. Tampoco ellos se habían dado cuenta de que el camino subía hacia arriba en contra de la dirección de la corriente. Si hubieran utilizado el método analógico de toda la vida. El mapa que les había proporcionado, no hubieran cometido ese error que casi les podía haber costado la vida y que gracias al cojo la habían salvado in extremis.

Pues ni me pagaron el rescate, ni me lo agradecieron y para más inri me perdieron un chaleco, dos chubasqueros y unos escarpines viejos. MORALEJA no volver a alquilar material a sobrados en la materia, pues dime de que presumes y te diré de que careces. Lo que más me fastidia  de su actitud es que ni siquiera fueron conscientes del peligro que habían corrido, ni la suerte que habían tenido, encontrando a ese hombre al que quizás y después de verles actuar, si hubiera sido al revés, no hubieran ayudado. Demostraron ser unos niñatos, ingratos y mal criados.

Un aprendizaje más santo Tomás.

 

 

Dejémoslo bien claro, no vendemos riesgo, vendemos aventura y como su propio nombre indica es una acción o un deporte de resultado incierto. Mostramos la naturaleza sin domesticar, tal y como es. Para ello nos servimos de embarcaciones, arneses o cuerdas. Si alguien pretende que le garanticemos la seguridad total, le respondemos: Que simplemente eso no existe en ninguna faceta de la vida, ¿cómo la vamos a ofrecer nosotros?. Las actividades o aventuras que ofrecen las empresas de turismo activo, y que algunos por darle enjundia les llaman malamente deportes de riesgo, (como si los otros deportes carecieran de riesgo alguno). Un simple partido de fútbol de solteros contra casados genera diez veces más de lesiones que nuestros deportes de aventura. Recientemente ha habido un fallecido practicando rafting en Montanejos (río Mijares, Castellón) los medios de comunicación se han encargado de difundirlo como si nunca hubiera habido un fallecido practicando deporte.  Al parecer el pobre hombre murió de un ataque cardíaco, algo imposible de detectar previamente. A cualquiera que trabajamos en este maravilloso oficio de guía nos podría haber pasado, aun teniendo la mayor experiencia y conocimientos sobre el medio, nadie queda exento de un incidente de tal calibre. Esos mismos medios de comunicación no resaltan la cantidad de fallecidos, por diferentes causas, que producen los deportes convencionales. En comparación con los deportes de aventura no hay parangón. El guía  es el primero en extremar el cuidado de sus clientes, sin eximirse de la dificultad que ofrece el paso o el lugar en sí.  Los consumidores de estos deportes son conscientes de que también deben de poner la atención sobre lo que están haciendo y actuar en precaución, porque saben que hay un factor que no depende del guía, ni de las herramientas que utiliza, sino de la propia naturaleza cambiante y caprichosa. Por eso y porque las estadísticas nos lo confirman practicar deportes de aventura es menos lesivo que el fútbol.» Con todos nuestros respetos al fútbol y sus practicantes».